PAZ. En la tarde de ayer tuvo lugar en la Plaza de España de Cabra una concentración organizada por la Asociación Feminista Violeta para alzar la voz contra la Guerra de Gaza, el genocidio por parte de Israel y contra todas las guerras.
Fueron alrededor de unas 150 personas las que acudieron al llamamiento de Violeta y se concentraron pacíficamente ayer a las puertas del consistorio egabrense para manifestar su repulsa al genocidio en Palestina y pidiendo el fin de la guerra. En el acto se leyó un manifiesto por parte de la presidenta de la asociacion Laura Moreno Ramírez, el cual les reproducimos en su integridad.
Manifiesto:
Los recientes acontecimientos en Palestina reflejan un conflicto que ha perdurado durante décadas, cobrando un alto costo humano y perpetuando la violencia y la deshumanización bajo la mirada pasiva de las principales potencias mundiales.
Los bombardeos sistemáticos de Israel en Gaza constituyen una escalada en su política de genocidio contra el Pueblo Palestino, ignorando los acuerdos internacionales y aplicando medidas extremas como el castigo colectivo.
En los últimos 9 meses, más del 80% de las viviendas, el 84% de los centros sanitarios y el 95% de las instalaciones de agua en Gaza han sido destruidas por más de 80.000 toneladas de explosivos lanzados en una zona que apenas supera en tamaño a la cercana localidad de Lucena, aunque alberga a más de 2.000.000 de personas.
Estas cifras desgarradoras, informadas recientemente por Save The Children, revelan un panorama devastador con más de 14.000 niños asesinados y 21.000 desaparecidos, incluyendo unos 4.000 posiblemente sepultados bajo escombros y otros 17.000 enfrentando el desamparo sin familiares vivos, detenidos por el ejército israelí o sepultados en fosas comunes. Gaza, hoy en día, es un cementerio de niños y niñas.
Como feministas comprometidas, condenamos enérgicamente toda forma de violencia y expresamos nuestra solidaridad con todas las víctimas civiles, independientemente de su origen.
No obstante, enfatizamos que las políticas de colonialismo, militarismo y racismo perpetuadas contra pueblos y territorios solo perpetúan un ciclo de destrucción y muerte.
Las acciones del Estado de Israel, incluida la opresión, la ocupación y la sistemática destrucción de Palestina y su población, constituyen una violación evidente de los valores fundamentales de igualdad, justicia y dignidad, así como de los derechos humanos más básicos.
Además, como es habitual en los conflictos armados, las mujeres, niñas y niños enfrentan desproporcionadamente las consecuencias devastadoras, agravando las desigualdades de género y enfrentando estructuras de violencia aún más severas debido a las políticas de demolición en Cisjordania y el bloqueo en Gaza.
Frente a esta situación, el fracaso de la comunidad internacional en actuar con contundencia deja una sensación de impotencia y desesperanza.
Más de medio siglo después, es evidente que los mecanismos internacionales diseñados para prevenir este sufrimiento han sido ignorados por el Estado de Israel.
Por tanto, el silencio y la complicidad no pueden ser la respuesta. Exigimos una postura firme y la adopción de medidas vinculantes para detener la violencia y garantizar la seguridad y el bienestar de la población palestina, basadas en los principios de los Derechos Humanos.
El sufrimiento en Palestina resuena profundamente en todos los rincones del mundo.
No podemos ser testigos pasivos de esta tragedia. No podemos tolerar la equidistancia ni los falsos paralelismos. El desplazamiento forzoso de casi 2.000.000 de personas en Gaza, junto con el bloqueo de suministros vitales y el bombardeo indiscriminado de viviendas, carreteras y hospitales, constituyen crímenes de guerra que deben ser condenados sin reservas.
La retórica deshumanizadora solo intensifica nuestra alarma frente a una situación en la que los valores humanitarios más fundamentales están en peligro de desaparecer.
En nombre de Violeta Asociación Feminista y como parte activa de la sociedad civil movilizada, expresamos nuestra solidaridad inquebrantable con el pueblo palestino y, en particular, con nuestras hermanas palestinas. Nos oponemos firmemente al genocidio y a la impunidad, y exigimos que la comunidad internacional garantice una solución justa y duradera que ponga fin a un conflicto arraigado en el colonialismo y que está causado un sufrimiento indecible.
¡Por el fin del genocidio del Pueblo Palestino y de todas las guerras!
