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Los sindicatos valoran el inicio de curso escolar solicitando que la Junta apoye a la Educación Pública entre otras demandas

EDUCACIÓN. Cuando todavía no han empezado a asistir a clase el alumnado de primaria y secundaria, ya han hecho una valoración del principio de curso los sindicatos con mayor representación del sector, coincidiendo en las graves deficiencias en cuestión de falta de profesorado, ratios altas y un mayor apoyo a la educación pública, y no a la privada y concertada por parte de la Consejería.

Por una parte, CSIF, primera fuerza sindical de la enseñanza pública en Córdoba y en Andalucía, exige a la Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional en el inicio del curso escolar 2024-2025 una mejora de las plantillas docentes, la reducción de la carga burocrática que soportan estos profesionales y la dignificación de la labor docente. Para el sindicato, estas reivindicaciones son esenciales para poder incrementar una atención individualizada y de calidad al alumnado.

El responsable del Sector de Educación de CSIF Córdoba, Antonio Pachón, denuncia que, a pesar de que en el cómputo total de la plantilla docente se ha registrado un ligero crecimiento, éste no ha sido homogéneo en todas las etapas educativas. De hecho, en Educación Primaria y Secundaria, precisamente aquellas que albergan al grueso de la población escolar, la plantilla se ha reducido en un centenar los efectivos en el último año en la capital y en la provincia, una merma muy preocupante puesto que ambos niveles educativos son fundamentales para la formación de los estudiantes cordobeses.

Según afirmó, “la Junta sigue reduciendo el personal en la enseñanza pública al ofertar solo una cuarta parte de los puestos para sustituciones, bajas y jubilaciones que se ofrecieron el año pasado en Córdoba, lo que traerá consigo que la gran mayoría de los centros de Infantil y de Primaria inicien el curso escolar con un profesional sin cubrir y que en algunos de ellos los alumnos de tres años o de 1º de Primaria vuelvan a su colegio sin tutor o tutora”.

Para CSIF, es imperioso incrementar el profesorado vinculado a la atención a la diversidad´ -maestros de educación especial: de Pedagogía Terapéutica (PT) y Audición y Lenguaje (AL)-, orientadores/as y profesorado para el desarrollo de labores de apoyo y refuerzo), sobre todo si se tiene en cuenta que el alumnado que presenta necesidades específicas de apoyo educativo ha experimentado un importante aumento en Córdoba, que no se ha visto correspondido con un incremento adecuado de los recursos personales de especialistas, lo que desencadena en el inicio de este curso escolar un gran desequilibrio en la atención educativa que se puede realizar.

La central sindical recuerda que lleva años alertando de que en la mayoría de ocasiones la atención especializada que recibe este alumnado es exigua, lo que provoca una deficitaria inclusión escolar. Esto unido al número elevado de alumnado en las aulas y el raquítico número de profesionales para atender la creciente diversidad está provocando que la atención educativa del conjunto del alumnado se vea afectada al eliminarse programas. Además de las medidas citadas, se hace imprescindible un Plan de Actuación contra las excesivas ratios que sufre el colectivo docente.

El representante sindical apunta que otra prioridad para la organización sindical, es la reducción de la carga burocrática que soporta el profesorado y que le resta tiempo que podría dedicar a las tareas propias relacionadas con el proceso de enseñanza y aprendizaje. En este sentido, CSIF se han presentado un centenar de propuestas a implementar sin que hasta la fecha la Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional haya puesto en marcha medidas tangibles que minoricen esta lacra impuesta a la labor docente que desvía el verdadero quehacer del profesorado y sólo sirve como mecanismo de fiscalización del profesorado.

CSIF defiende que, además de estos aspectos, es fundamental dignificar la labor docente, mejorando sus condiciones laborales, poniendo en valor la encomiable función que realizan los maestros y profesores cordobeses e implementando una carrera profesional y medidas de promoción interna. Por este motivo, el sindicato reclama a la Consejería que articule los mecanismos necesarios para que el profesorado no salga del sistema educativo una vez concluida su trayectoria profesional, de la misma manera que entró, sin opciones a carrera y con la única diferencia de haber adquirido trienios y sexenios.

A juicio de Pachón, los docentes están sobrepasados en exigencias, tareas, funciones, responsabilidades y, por ello, debe ser prioritario reducir la parte lectiva de sus horarios, lo que se traduciría en una mejora sustancial de la atención individualizada que precisa el alumnado, la mejora de la coordinación docente, así como poder dinamizar nuevas metodologías, planes y programas de innovación educativa.

Por otra parte, CSIF denuncia que la Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional ha procedido a reordenar la FP a distancia, lo que ha implicado una reducción significativa en el número de plazas ofertadas a los/as estudiantes y una disminución de los cupos docentes. Esta evidente detracción de recursos en la FP pública ha permitido que la enseñanza privada siga aumentando su número de alumnado.

Para CSIF Educación Córdoba la enseñanza pública “es la única que conduce a la equidad y la única universal e inclusiva” y reitera que se opondrá al establecimiento de conciertos educativos, máxime en enseñanzas no obligatorias como Bachillerato y FP. De este modo, considera necesaria una apuesta “nítida y clara” por un modelo público de FP y critica la proliferación de centros privados registrada en los últimos años.

En estos momentos en los que se están gestando los Presupuestos de la Junta de Andalucía para 2025, la central sindical reclama una mayor inversión en la educación pública y que la Junta no mire para otro lado y siga con discursos que se alejan de la realidad.

Por su parte, el Sindicato de Enseñanza de CCOO de Córdoba afirma que estamos sufriendo un modelo de privatización y de continuos recortes en todos los niveles del sistema educativo público andaluz (incluido el universitario). “Hay una clara estrategia de desmantelamiento del sistema, siguiendo los pasos de otras comunidades gobernadas también por el PP, y, lógicamente, Córdoba no es ajena a ese deleznable proceso”, señala el responsable de Pública Docente, José Enrique Guerra.

Según CCOO, ese ataque es muy evidente en la Formación Profesional, en general, y en la Formación Profesional a Distancia, en concreto. De hecho, en Formación Profesional ya hay más matrículas en la educación privada-concertada que en la educación pública en la capital cordobesa. Y eso irá a más cuando el Campus de Formación Profesional de la antigua Escuela de Agrónomos se abra en 2026. En ese campus, por supuesto, solo se ofertará Formación Profesional privada. “Con este, la Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional y su Delegación cordobesa han perdido una oportunidad para crear el Centro Integral de Formación Profesional que tanto necesita Córdoba. Sin embargo, lo que han hecho es crearlo en el ya existente IES Galileo Galilei. Pero la manera de hacerlo ha sido quitando la Secundaria y el Bachillerato de ese centro y expulsar a esos alumnos del barrio sin  aumentar la oferta de Formación Profesional en este centro”, critica Guerra.

A eso hay que sumarle el continuo cierre de líneas en centros públicos de toda la provincia. “En Córdoba capital el caso es muy sangrante, ya que han asfixiado a todos los CEIP dejándolos en una sola línea. Además, se están privatizando muchos servicios. Sobre todo, es el caso de los comedores escolares. De manera que hay cada vez más comedores de catering y menos con cocina propia de gestión directa. Con ello se empeora la calidad del servicio y se pierden puestos de trabajo público”, sostiene el responsable sindical.

Un paso más con respecto al cierre de líneas es el cierre de centros completos públicos. Es el caso del cierre de dos colegios en Las Palmeras (CEIP Duque de Rivas, que tenía también hasta 2º de ESO, y el CEIP Alfonso Churruca; ambos, por cierto, con cocina propia de gestión directa). “Han agrupado a todos los alumnos en el CEIP Pedagogo García Navarro. Con ello aumentan la ratio en un centro con alumnos tan necesitados, empeorando así el sistema y haciendo que la “guetificación” del barrio sea una realidad, con las trágicas consecuencias que ello conlleva y que veremos en los próximos años”, lamenta el responsable de Pública Docente de CCOO de Córdoba.

“Con estas medidas estamos ante un recorte de las plantillas de todos los profesionales que realizan su trabajo en centros educativos. Es decir, este curso tenemos menos docentes y menos personal laboral en la provincia de Córdoba. En general, donde se sufre más ese recorte es en la atención a la diversidad y la atención al alumnado con necesidades educativas especiales, que cada vez más sienten mermados sus recursos”, subraya José Enrique Guerra.

En el caso de los docentes, se nota en las convocatorias de provisión de interinidades. “Eso lo vemos en la primera convocatoria de este curso”, dice Guerra quien explica que “esta convocatoria se ha realizado el día 4 de septiembre para la incorporación de los maestros en el primer día de colegio el día 10. Pues bien, en esa convocatoria solo han ofertado 51 vacantes para toda la provincia de Córdoba. Cifra a todas luces insuficiente y que supone que habrá un buen número de aulas llenas de niñas y niños sin la maestra y maestro que les corresponde. Veremos qué pasa en la convocatoria del día 10 para el resto de cuerpos, pero las expectativas son negativas. Y este caso se repetirá en Secundaria y el resto de enseñanza”, augura el representante sindical.

En ese entorno de privatización no se escapa el sistema universitario cordobés. El gobierno andaluz del PP impone un modelo universitario de dos velocidades: por un lado, impulsa y facilita el desarrollo de las universidades privadas y, por otro, pone piedras e impedimentos en el caso a las universidades públicas. Por ejemplo, impide que la Universidad de Córdoba pueda implementar el grado de Ciencias del Deporte, con unas salidas profesionales enormes, alegando precisamente la falta de futuro laboral para sus egresados y, sin embargo, habilita que la misma titulación pueda ser ofrecida por alguno de los centros privados aterrizados en la Costa del Sol.

El sindicato de Enseñanza de CCOO Córdoba condena este plan de privatización y sus consecuencias en el sistema educativo público cordobés. “Ante esto, estaremos en frente luchando por los derechos de todos los profesionales educativos cordobeses”, apostilla Guerra.