INFANCIA. Mª José Serrano, secretaria de Bienestar Social, y Guillermo Martín, Secretario de Juventud de la Ejecutiva Local socialista, dieron conocimiento en la sede de su partido del manifiesto elaborado por la Agrupación Local del PSOE. Textualmente os dejamos dicho manifiesto.
Un año más se conmemora el Día Mundial de la Infancia con el fin de recordar a la ciudadanía que los niños y niñas son el colectivo más vulnerable y, por tanto, el que más sufre las crisis y los problemas del Mundo; también sirve para hacer un llamamiento mundial sobre las necesidades de los más pequeños y pequeñas; así como para dar un merecido reconocimiento a las personas que cada día trabajan para que los niños y niñas tengan un futuro mejor.
Desde su fundamentación se abordan cuestiones relativas a los distintos derechos de los y las menores, el derecho a la educación, dónde se recoge, la inclusión en las escuelas, las nuevas metodologías, la participación, las barreras socioeconómicas y el acoso escolar; los derechos relativos a la vida, la salud, el derecho a jugar, el derecho a la vida familiar, la protección frente a la violencia, el derecho a la no discriminación y el derecho a ser escuchados; todo ello independientemente del lugar del mundo en el que hayan nacido.
A pesar de los avances, legislativos y el trabajo realizado, La Convención de los Derechos del Niño establece que actualmente 385 millones de niños y niñas viven en situación de pobreza extrema, 264 millones de menores no están escolarizados y alrededor de 5 millones de niños y niñas menores de cinco años mueren cada año por causas que podían haberse prevenido.
Y si estos datos por sí solos son poco alentadores tenemos que añadir la crisis de la COVID-19 que está teniendo un impacto sin precedentes a nivel mundial; este impacto no está siendo igual para todas las personas pues como en toda crisis, los sectores más vulnerables serán los que paguen el precio más alto. En realidad, ya lo están haciendo pues los niños y niñas de familias con mayor estabilidad económica y un ambiente familiar sano, superarán este bache con mayor éxito que los niños que viven en ambientes familiares tóxicos o cuyos ingresos se desplomen de repente y se vean con dificultades en el futuro.
“Save the Children” estima que como consecuencia de esta pandemia a finales de año uno de cada tres niños y niñas se encontraría en situación de vulnerabilidad ya que serán los hogares con menores a cargo los que más sufran los efectos de la crisis económica y social provocados por la pandemia. Y es que el riesgo de pobreza no es igual para todos. Si no se toman las medidas necesarias para reducir la desigualdad y la pobreza entre aquellas familias que más lo necesitan, corremos el riesgo de dejar a toda una generación atrás.
El reciente periodo de confinamiento vivido por las familias debido a las medidas tomadas para la prevención de la COVID-19 está repercutiendo en distintos aspectos de la salud de la población y, más concretamente, en la salud infantil. No es raro encontrar artículos que nos muestran los riesgos para la infancia de sufrir distintos problemas emocionales, derivados de la incertidumbre y la necesidad de enfrentarse a un problema que detectan, aunque no comprendan.
Otra situación que ha hecho saltar las alarmas ha sido la brecha digital que se puede dar tanto, por una desigualdad en el acceso físico a las herramientas digitales como en la alfabetización digital, aspectos que han afectado a la posibilidad de teletrabajo y de una educación a distancia adecuada, de gestión de trámites diversos, de suministro de productos de primera necesidad, de acceso y uso de los servicios sanitarios y sociales, de acceso a la información, de apoyo social, dando lugar a una mayor vulnerabilidad a la enfermedad.
Las personas más afectadas han sido las personas mayores, las personas de clases sociales desfavorecidas, las personas sin hogar, las personas migrantes, las personas con discapacidad y la infancia; esta crisis ha cambiado el estilo de vida de la noche a la mañana, y es que nos surgen preguntas sobre cómo les va a impactar esto a nuestros/as menores a nivel generacional ¿ Puede haber una regresión a los tiempos en que nuestra sociedad no conocía un sistema sanitario fuerte, no conocía las vacunas y se temía por la salud? o ese miedo colectivo de que los niños y niñas puedan transmitir el virus a la población mayor, lo que ha supuesto un cambio radical en la vida familiar. Y es que la sola relación con los abuelos puede convertirse en un problema social enorme; preocupa que se esté convirtiendo a los niños y niñas en los apestados/as de esta epidemia. Existe una razón médica tras esto, pero sus implicaciones son terribles a todos los niveles ya que hay muchos niños y niñas para quienes sus abuelos son un punto de referencia fundamental, por ejemplo, menores que viven ambientes tóxicos en sus hogares y dependen fuertemente de vínculos externos; por no hablar de los dos millones de niños que viven en riesgo de exclusión social, o directamente dentro de ella, en familias para quienes la solidaridad familiar es un amortiguador fundamental. ¿Qué pasará con estos menores tras la no asistencia a clase, la inexistencia de las relaciones con su grupo de iguales, con sus profesores, la ausencia de esas figuras de apego que son tan importantes para su estabilidad? ¿Cómo será la vuelta a la normalidad que conocíamos?
Desgraciadamente este año este manifiesto se ha centrado en las circunstancias que estamos atravesando, aunque no nos olvidamos de otras problemáticas como la violencia de género de la cual los menores son también víctimas, o temas como el Bullying, la explotación sexual, entre otros.
Por todo lo expuesto anteriormente desde la Agrupación Socialista Egabrense queremos en primer lugar dar un merecido reconocimiento a la Infancia, a nuestros menores los cuales han dado una gran lección al resto de la población a la hora de adaptarse a las restricciones, a los nuevos hábitos y normas, a las circunstancias en general.
Reconocimiento también a los colectivos y Asociaciones que se han puesto manos a la obra para ayudar a las familias en materia de alimentación y cobertura de necesidades básicas, así como a todas las Administraciones Públicas locales cuya función diaria es la atención de los colectivos más vulnerables de esta Ciudad y que en esta pandemia han tenido que realizar su labor profesional en unas circunstancias más extremas y difíciles que nunca y como no a nuestros sanitarios.
Para terminar, pedimos a nuestro partido y demás representantes políticos que juntos trabajemos para minimizar las consecuencias negativas de esta grave Pandemia, mejoremos nuestros sistemas educativo y sanitario y demos una lección y ejemplo de convivencia y civismo, pues los más pequeños y pequeñas han dado una gran lección de superación y adaptación, porque tengan un futuro fructífero y alentador ya que así lo merecen pues son el futuro y vivirán la herencia que les dejemos.