BALONCESTO. Hace pocos días se celebró en Peñarroya-Pueblonuevo el campeonato de Andalucía de baloncesto de selecciones provinciales en categoría cadete masculina, del que resultó vencedora la selección de Málaga.
En el triunfo malagueño ha tenido mucho que ver la actuación de un joven egabrense, Emilio Trujillo Marín, que esta temporada milita en un club de la Costa del Sol, el CB Novaschool, un club colegial que integra deporte y estudios y que, pese a no contar con con gran renombre ni fama como lo tienen los clubes de élite del baloncesto español, cuenta con una de las ofertas formativas más destacadas no solo a nivel autonómico, sino también en el conjunto de España.
Y es que el comienzo de temporada del baloncesto ha tenido en Cabra esta novedad que ha pasado inadvertida para la gran mayoría de aficionados locales del deporte de la canasta, pero que ha supuesto la marcha de la joven perla de la cantera del CDB Cabra.
Así, Emilio ha finalizado su periplo en el club donde dio sus primeros botes allá en el 2010 cuando apenas contaba con cuatro años de edad y en el que ha protagonizado una espectacular trayectoria que incluye la consecución de cinco campeonatos y dos subcampeonatos provinciales, además de un subcampeonato de Andalucía. Durante once temporadas ha llevado el nombre de Cabra por montera, exhibiéndolo en innumerables torneos y competiciones, siendo integrante de la selección cordobesa en seis temporadas obteniendo dos medallas de plata y dos de bronce en los campeonatos de Andalucía, así como integrante de la selección andaluza en dos temporadas, consiguiendo una medalla de bronce y el hasta ahora mayor logro de su carrera: el campeonato de España en categoría Infantil.
Esperamos que los logros de este joven deportista sigan llegando y que en un futuro podamos verlo luchando por grandes gestas e incluso, por qué no, volviendo a su club de toda la vida, ahora que el proyecto del CDB Cabra apunta a volver a situar el baloncesto egabrense donde estuvo hace ya más años de lo que nos gustaría.