RELIGIÓN. Tras la misa y aun de noche, partía la Patrona de Cabra, la Virgen de la Sierra, para su ermita en el picacho egabrense. Gran multitud de gente la despedía en la parroquia de la Asunción y Ángeles y a lo largo del recorrido muchos egabrenses bajaban de sus casas para darle su adiós hasta el año que viene. Después de su paso de amanecida por la Barriada que lleva su nombre y su parada en la iglesia San Francisco y San Rodrigo, la alcaldesa perpetua de Cabra se dirigió hacia las inmediaciones de la Vía Verde, donde se procedió a echar los cordeles para que los acompañantes ayudaran en su costoso trabajo a los costaleros de la Virgen camino de "Góngora". Después se le cantó la Salve en la casilla que lleva ese nombre.
Viene al recuerdo la poesía que en su día hizo Manuel Ruiz Madueño sobre la "subía" que decía:
La "Bajá" del día 4 de septiembre trajo a la Virgen de la Sierra para que en su honor se celebrara la Feria grande de Cabra, a la que su procesión del dia 8 puso fin. Poco más de un mes ha estado la Virgen de la Sierra en su pueblo, habiendo sido visitada a diario por muchos fieles que bajaban a la parroquia de la Asunción a rezarle y participar en las muchas actividades de culto que la Archicofradía había preparado al efecto.
Con la subida de hoy se despiden los egabrenses y demás fieles de la comarca de la presencia de la Virgen de la Sierra, que será visitada en su ermita durante el resto del año, donde se celebrarán multitud de romerías.