El Arcángel vestía sus mejores galas. Se estrenaba como estadio de Primera División tras un periodo demasiado largo sin fútbol de la máxima categoría en la capital califal. El himno sonó a capella, espectacular como siempre. El rival era un Celta de Vigo de gran recuerdo para el cordobesismo porque en aquella ciudad se logró clasificar el Córdoba CF para Play Off de ascenso con Paco Jémez hace 3 temporadas. Y se quería sumar los tres puntos, pero no pudo ser. El rival fue dignísimo y arrancó un punto que pudieron ser tres, pero una gran segunda parte del Córdoba donde demostró un magnífico poder de reacción, valió para sumar el primer punto de la temporada.

El Celta no tardó mucho en hacerse con el control del juego. Sus dos interiores, tanto el sanluqueño Nolito como el chileno Fabián Orellana, fueron una auténtica pesadilla para la defensa cordobesista, que en la primera parte no consiguió detenerles de ninguna de las maneras.

Con todo, el primer disparo del encuentro llevó la firma de Fede Cartabia. Tras una incursión por banda derecha del lateral serbio Alexandar Pantic, el extremo procedente del Valencia tuvo dos opciones y escogió la peor. Pudo devolverle el balón al lateral para que entrase por banda y pusiese el pase de la muerte, pero decidió disparar a la portería de Sergio Álvarez, marchándose el esférico muy desviado por encima del larguero.

A partir de ahí, el Córdoba desapareció del partido. Y no por iniciativa propia, sino porque el Celta se adueñó del balón y comenzó a conectar con sus dos cuchillos, ya reseñados anteriormente.

El primer intento vino por parte del chileno, que a los 5 minutos se internó por banda derecha y puso un pase al interior del área chica que no encontró rematador. El pase lo recogió Nolito y volvió a poner el balón en el corazón del área, pero por suerte se paseó nuevamente y la jugada acabó ahí.

Cuatro minutos después, entró en acción Nolito. Agarró el balón en la izquierda, se marchó de cuantos jugadores cordobesistas le salieron al paso y la defensa tuvo que emplearse a fondo para despejar a córner en una jugada que llevaba marchamo de gol. Sólo un minuto después, fue Orellana el que hizo trizas a la defensa cordobesista, conectó con Nolito y el disparo de éste se marchó a córner desviado nuevamente por la defensa.

A los 16 minutos, lo volvió a intentar el chileno. Esta vez fue él mismo quien probó el disparo a puerta y se encontró con Juan Carlos, que sólo dos minutos después volvió a realizar una gran parada, esta vez a Larrivey, cuyo rechace fue a parar a los pies de Nolito. El jugador celtista no perdonó y marcó el primer gol del partido, pero la jugada fue anulada por el juez de línea por encontrarse en situación de fuera de juego. Dos minutos después, Nolito volvió a coger desprevenida a la defensa que tuvo que desviar a córner cuando ya se plantaba sólo ante Juan Carlos.

A partir de ahí, el Córdoba fue sacudiéndose poco a poco el dominio territorial del equipo visitante y consiguió montar un buen contragolpe donde Ryder Matos fue derribado poco antes de acercarse al área, lo que le costó a Jonny la primera tarjeta del encuentro. Esa falta acabó con un remate de Íñigo López que salió muy desviado, y tres minutos después otra que lanzó Fede Cartabia desde la derecha no pudo encontrar rematador porque la lanzó con excesiva fuerza. Dos minutos después, volvió a ser protagonista el argentino, que se marchó de dos defensas pero su centro en el interior del área volvió a salir por banda ya que se pasó de fuerza al poner el balón en la cabeza de alguno de sus compañeros.

En el minuto 36 llegó la mejor aproximación del Córdoba. Ryder Matos ganó un balón en la banda izquierda y puso un centro al interior del área al que no llegó Havenaar por muy poco. El esférico salió rebotado y lo recogió Fede Cartabia al borde del área. El argentino disparó buscando la cepa del poste de derecho de Sergio pero no encontró el gol de milagro.

A partir de ahí, hubo tiempo para poco más en El Arcángel. Una tarjeta para Cabral por cortar una contra de López Silva y una jugada de Nolito nuevamente por todo el frente del ataque donde no consiguió disparar a portería porque la defensa le cerró muy bien, fueron el preludio de la segunda parte, donde sí se movería el marcador.

Los segundos 45 minutos comenzaron con un cambio en el Córdoba. Ryder volvió a quedarse en el banquillo al igual que el Lunes en el Bernabéu y su lugar lo ocupó Borja García, que de esta manera volvía a jugar en competición oficial con los blanquiverdes.

El Córdoba salió en busca del gol de forma más decidida y un nuevo ataque fue cortado en falta por Radoja, que de esa manera veía la tercera amarilla para su equipo. Tras esa jugada, y cuando parecía que el Celta no estaba tan incisivo como en el primer tiempo, un disparo desde la frontal de Orellana sin aparente peligro, se coló en la portería de Juan Carlos, que no estuvo excesivamente acertado ya que dio la impresión de poder haber hecho bastante más.

Al contrario de lo que podía parecer, el Celta se vino abajo tras marcar y el Córdoba sintió que ese gol era el acicate que necesitaba para acabar de soltarse la melena y buscar el gol con más insistencia. Y a fe que lo consiguió. Tras varios escarceos sin excesivo peligro, llegó el gol del empate. Rossi hizo una gran jugada por la derecha, puso un centro al área que despejó la defensa celtista, pero el balón quedó suelto y Fede Cartabia disparó con la zurda ajustado al poste y llevó el delirio a las gradas de El Arcángel.

Era el minuto 59 y el Córdoba, sólo dos minutos después, estuvo a punto de hacer el segundo y ponerse por delante. Fede Cartabia volvió a ser protagonista en una jugada en la que agarró la pelota en la línea de medios, se aproximó al área y sirvió una gran asistencia a Borja García, que recortó a su defensor y disparó buscando el palo largo de la portería de Sergio, pero su disparo golpeó en un defensa perdiendo así la ocasión de marcar de nuevo.

A partir de ahí, el partido entró en una fase de imprecisiones en la que ninguno de los dos contendientes conseguía acercarse con peligro a la meta rival. Ekeng debutó sustituyendo a un López Garai que estaba exhausto y sólo tardó tres minutos en ver la amarilla por llegar tarde a un balón dividido.

También hubo tiempo para que entrase Charles, entre división de opiniones, y que fue protagonista de la última jugada de peligro del Celta, que acabó con el balón golpeando en el poste derecho y saliendo a córner, pero la jugada fue anulada por estar el brasileño en situación antirreglamentaria.

Y la última del partido fue para el Córdoba. A los 87 minutos, Fede volvió a hacer una gran jugada por su banda y sirvió un a la corona del área donde Xisco, que había entrado poco antes por un Havenaar muy desacertado, controló el balón e intentó darse la vuelta para rematar, pero Cabral le ganó la partida y no le permitió conectar el remate, con lo que se perdió la ocasión de darle la vuelta al marcador.

En resumen, un gran partido el que se vio ayer en El Arcángel con un justo reparto de puntos tras dominar cada parte un equipo distinto. Ahora toca parón en la Liga, y después dos derbis consecutivos. El Viernes 12 ante el Almería fuera de casa, y el Domingo 21 ante el Sevilla en El Arcángel.

FICHA TÉCNICA

CÓRDOBA CF: Juan Carlos, Pantic, Íñigo López, Gunino, Pinillos, López Garai, (Ekeng, min 71), Rossi, Fede Cartabia, Ryder Matos (Borja García, min 46), López Silva y Havenaar (Xisco, min 78).

CELTA DE VIGO: Sergio, Jonny, Cabral, Fontás, Planas, Radoja, Álex López (Augusto, min 64), Krohn-Delhi, Nolito (Hernández, min 84), Orellana y Larrivey (Charles, min 77).

ÁRBITRO: José Antonio Teixeira Vitienes (cántabro). Amonestó al local Ekeng y a los visitantes Jonny, Cabral, Radoja y Augusto.

GOLES: 0-1 Orellana, min 51. 1-1, Fede Cartabia, min 59.

INCIDENCIAS: Partido correspondiente a la segunda jornada de Primera División, disputado en El Arcángel ante 15892 espectadores, 50 de ellos llegados desde Vigo.

SALA DE PRENSA

El primero en salir a rueda de prensa fue el técnico argentino del Celta, Eduardo Berizzo, que valoraba que “me voy contento porque hemos puntuado en un campo muy complicado, con una afición que aprieta mucho. Merecimos quedarnos con los tres puntos, pero el gol que hicimos, al contrario de lo esperado, nos desacomodó. Se jugó muy bien en el primer tiempo, pero no pudimos convertir las ocasiones que creamos”. Preguntado por si le parecía justo el resultado, decía que “no soy objetivo para decir si el resultado es justo, aunque creo que si el 0-1 se hubiese mantenido más tiempo, hubiésemos matado a la contra”. También le preguntaban su opinión sobre el Córdoba, del que dijo que “es un equipo intenso, con jugadores muy buenos en el uno contra uno, que sobre todo nos complicó las cosas en el segundo tiempo”.

Posteriormente, salía a sala de prensa Albert Ferrer. Al técnico cordobesista no le gustó nada “la primera parte, por lo que me quedo con lo más positivo, que es que el equipo supo reaccionar en el segundo tiempo y conseguir un empate que considero que es justo. Vi al equipo atenazado en la primera parte y falto de confianza, pero es el peaje que hay que pagar cuando tienes en el equipo a muchos jugadores que están debutando en Primera División”. También decía que “nos tocó jugar hoy ante un rival con más pretemporada, y nos hicieron mucho daño metiéndose con el balón por dentro. Es muy difícil levantar un partido después de la primera parte que se ha hecho, pero en el fútbol no vale de nada lamentarse y hay que reforzar lo bueno y ser positivos”.