CONSUMO. La Dirección General de Consumo de la Junta de Andalucía ha planificado un total de 9.000 actuaciones en las 18 campañas que comprende el Plan de Inspección de Consumo de 2024. Nueve campañas corresponden al sector de los servicios; cinco, a los productos industriales; y cuatro, al sector los alimentos. Además de los controles de etiquetado, también se realizarán tomas de muestras de productos. El objetivo de la inspección de consumo es comprobar el cumplimiento de las normas vigentes y garantizar y reforzar los derechos de las personas consumidoras.

El mayor número de actuaciones corresponde a las campañas de control de servicios. En total, en este sector se prevé la realización a lo largo del año 5.000 controles (55,5% del total). Se vuelve a incidir en ámbitos como la contratación a distancia (web), la vivienda, la publicidad y las prácticas comerciales desleales, los establecimientos de restauración, las telecomunicaciones o los talleres de reparación de vehículos.

También se incorporan novedades en el sector de los servicios, el control de bolsas de plástico, la campaña de inspección de academias de formación o sobre las condiciones generales de contratación de las entidades de suministro eléctrico y de gas.

En cuanto a las campañas de control de productos industriales, contemplan un total de 2.000 actuaciones, repartidas entre 5 campañas. En este ámbito, cabe resaltar las actuaciones inspectoras sobre productos destinados a personas menores de 14 años. En este sentido, se ejecutarán nuevamente las campañas de seguridad y etiquetado de juguetes, así como de disfraces, caretas, máscaras y similares destinados a ser utilizados por menores de 14 años. También se incluye una campaña de inspección sobre artículos de puericultura.

Por último, entre las 4 campañas de control de alimentos también está prevista la realización de 2.000 actuaciones. Entre ellas, las correspondientes al Plan de control general de la información y la calidad de los alimentos y a la campaña nacional de inspección en el marco del Plan Nacional de Control Oficial de la Cadena Alimentaria 2021-2025, a través de las que se busca comprobar la adecuación del etiquetado a la normativa, así como la existencia de adulteraciones o fraudes. La inspección en el ámbito alimentario nuevamente vuelve a tener como productos a controlar la miel y la carne, el jamón, la paleta y la caña de lomo ibéricas.