EDUCACIÓN. Las organizaciones sindicales de la Mesa Sectorial de Educación (CSIF, ANPE, CCOO, FesP-UGT y USTEA) han solicitado la convocatoria urgente de una reunión de este órgano para analizar, entre otras cuestiones, la vuelta a las aulas en septiembre, para la que entienden que no existen recursos, ni personales ni materiales suficientes, adecuados de cara a un regreso con seguridad en el contexto de la actual pandemia.
En un escrito conjunto dirigido a la viceconsejera de Educación, María del Carmen Castillo Mena, los sindicatos de la enseñanza pública andaluza expresan su inquietud ante la situación actual, así como su voluntad de participar en el proceso de diálogo que ha anunciado el departamento que dirige Javier Imbroda para profundizar en medidas que permitan una vuelta segura a las aulas el próximo mes de septiembre.
En dicho escrito, por una parte, los sindicatos demandan “un estudio pormenorizado de las vacantes en juego, en el procedimiento anual de adjudicación de destinos provisionales, actualmente en marcha” y “especialmente, tras comprobar una disminución de las vacantes asignadas al cuerpo de maestros respecto al procedimiento celebrado el año pasado, lo que ha afectado de forma negativa al personal funcionario e interino de este cuerpo docente, en particular al de Primaria”.
Igualmente, recuerdan que “tal y como solicitamos en Mesa Sectorial, las vacantes previstas para reforzar la atención educativa en la crisis sanitaria originada por la COVID-19, deben asignarse en la resolución definitiva de este procedimiento anual de adjudicación de destinos provisionales, ya que de hacerse en septiembre, se estarán lesionando los legítimos intereses tanto del personal funcionario participante como del personal interino con mayor tiempo de servicio”.
Por otra parte, las organizaciones trasladan su preocupación respecto al inicio de curso en el actual contexto de crisis sanitaria y recuerdan que “en la Mesa Sectorial que se celebró a principios de julio, los legítimos representantes del profesorado que integramos dicho foro negociador, expresamos de forma unánime nuestro firme desacuerdo y rechazo hacia las instrucciones que finalmente vieron la luz el 6 de julio”.
Este rechazo estuvo motivado fundamentalmente por “la responsabilidad conferida a los equipos docentes y, muy en particular a los equipos directivos, además de considerar insuficientes los recursos personales y las medidas de seguridad y salud previstas”.
“La propagación del virus en el periodo estival está siendo alarmante y exigimos –según indica el escrito-- que si efectivamente se va a abundar en el tema, los representantes del profesorado seamos partícipes de dicho debate y sean atendidas las peticiones ya expresadas”, para lo que solicitan la citada convocatoria de la Mesa Sectorial.