LUCENA.
El obispo de la Diócesis de Córdoba, Demetrio Fernández, presidió el sábado, 18 de enero, la ceremonia de reapertura del templo.
Tras seis meses de obras, la parroquia lucentina de Santiago Apóstol abre sus puertas al culto.
Las obras de restauración de la iglesia parroquial de Santiago han afectado tanto al pavimento, refuerzo estructural en las tirantas que sostienen los muros de la Iglesia, la electricidad, la megafonía, la restauración de imágenes y del Sagrario, así como a las columnas del templo. Para ello, ha contado con la aportación del Obispado y de algunos particulares lucentinos, que han respondido a la llamada del párroco, Francisco de Asís Roldán.
Las obras, que han supuesto un coste de 116.000 euros, se han realizado bajo la dirección del arquitecto lucentino Rafael Pineda.
Añadir nuevo comentario