CABRA. Continuando con el Ciclo de Constitucionalismo que organiza el Ateneo Ciudadano de Cabra, ayer tarde le tocó el turno a la exministra y profesora de Derecho Constitucional en la Universidad de Córdoba, Carmen Calvo Poyato.
La presentación de la conferenciante estuvo a cargo de uno de los miembros del Ateneo, Manolo Flores, quien dijo que poco podía decir de Carmen Calvo, puesto que al ser paisana era sobradamente conocida. Recordó que ella ya ha estado presente en dos de los actos organizados con anterioridad, pero que en esta ocasión estaba allí por la aportación que podía hacer como experta en temas constitucionales tras una amplia carrera como docente universitaria.
Carmen Calvo agradeció la oportunidad que nuevamente le brindaba el Ateneo y decía sentirse muy cómoda en su pueblo, estando encantada de poder asistir a cuantos actos es reclamada siempre que su disponibilidad se lo permitía.
Entró de lleno en el tema con un lenguaje claro, habló de nuestra actual Constitución y de su difícil redacción en tiempos tan convulsos. Alabó el texto jurídico que nos dimos los españoles y remarcó claramente que después de cuarenta años necesitaba reformas, pero no empezar de cero con una nueva, puesto que eso sería un enorme error. También comentó que el alcance del contenids del texto constitucional no es conocido por los españoles de a pie porque nos falta pedagogía en este tema, y puso el ejemplo de la vivienda, que siendo un derecho constitucional no implicaba la obligatoriedad de que el Estado le diese una vivienda a cada ciudadano, sino que se trata de que los distintos gobiernos deben legislar con políticas para hacer que la vivienda sea accesible a los ciudadanos, y eso unas veces se hace más y otras menos, dependiendo de la sensibilidad del gobernante.
Carmen Calvo habló también de llevar a cabo un proceso constituyente para estudiar en profundidad los cambios que se necesitarían hacer en la Constitución, mirando al futuro e intentando que lo que se revise sea el marco legal que los españoles tengan que acatar por otro largo tiempo, remarcando que es la norma suprema y no puede estar modificándose al arbitrio de cada gobierno, sino que son los gobiernos los que se deben atener a ella. En derecho comparado, y al hilo de esto, recordó lo antiguas y poco reformadas que están otras constituciones, por ejemplo la americana, de la que dijo que se hacían enmiendas que no servían de nada porque al final se incumplía sin el menor reparo, o la inglesa, donde ni siquiera existe.
Por último, destacar que también comentó el tema de los distintos territorios y su difícil encaje en una norma común, dijo que la actual Constitución inventó el estado de las Autonomías para dar en aquel momento una salida a lo que podía ser un obstáculo serio, siempre entendiendo la diversidad de culturas y territorios históricos. Y recordó que los votantes catalanes dijeron sí al texto constitucional en un altísimo porcentaje, y dijo que no valía eso de decir, como hay muchos que lo dicen, que ellos por edad no votaron ese texto de ahí que no lo respeten ni les sirva, afirmó que eso era no entender en absoluto lo que era la constitución de un país.
En el turno de preguntas también salió el tema de las posibles inconstitucionalidades que existen en dentro de la propia Constitución, donde por un lado se habla de igualdad y por otro en los derechos dinásticos de la monarquía española se margina a la mujer. Carmen dijo que evidentemente esa sería una de las cosas a reformar y también plasmar claramente el tema de la igualdad entre hombres y mujeres, cosa que no ocurre ahora mismo. Otra cuestión que surgió fue el derecho de un territorio a la independencia dentro de una democracia, evidentemente por el tema catalán, y dijo que ese derecho no existe y que, además, no puede existir en ninguna constitución democrática.