TURISMO. Una nueva experiencia del área de Turismo apostará por la combinación de la gastronomía montillana, la naturaleza y la observación de estrellas en la Sierra de Montilla. Así lo ha explicado el delegado de Turismo, Manuel Carmona, que esta mañana ha presentado la que será la primera ruta G-Astronómica en cuyo diseño han colaborado también la empresa turística local Mundaventos y la asociación ADMIC para la divulgación de la ciencia, de Montilla.
“Llevamos años poniendo en valor nuestros cielos como recurso turístico, primero desde el cerro del Castillo del Gran Capitán y después desde este mirador del Cerro de Don Juan, en la Sierra de Montilla”, ha explicado el responsable de Turismo, quien ha añadido que “aunque este paraje natural del Cerro de Don Juan no cumple las condiciones lumínicas para certificarlo como destino Starlight sí que permite la observación de estrellas con buenos resultados en un paraje con una atmósfera muy especial”.
La actividad que tendrá lugar el día 30 de junio consistirá en una ruta senderista nocturna de 9 km que partirá del Pabellón de Deportes del Molinillo (c/ Luis Braille) y alcanzará el Cerro de Don Juan. Esta 1ª edición será gratuita, contará con 50 plazas y será necesaria inscripción en el WhatsApp y teléfono de la Oficina de Turismo, 672 78 05 21. Según ha explicado el responsable de Mundaventos, Miguel Feria, el trayecto tiene un nivel de dificultad media, está pensado para todos los públicos y “prácticamente es llano excepto los tres últimos kilómetros”.
Carmen Bellido, de la asociación ADMIC ha señalado que la observación de estrellas correrá a cargo de la Asociación Astronómica cordobesa, que aportará sus conocimientos y telescopios para llevar a cabo esta actividad el viernes 30 de junio, una noche propicia para el astroturismo en la Campiña Cordobesa.
El valor paisajistico del Cerro de Don Juan
El Cerro Don Juan, en el punto kilométrico 6 de la carretera que une las localidades de Montilla y Cabra, en la zona de la Sierra de Montilla conocida como Cuesta Blanca, es un espectacular mirador desde donde se avista, en primer plano el Cerro Macho, el más alto de la localidad, y a la derecha de este y en la lejanía las sierras de Lucena y Rute e incluso el pico Bermejo perteneciente a Priego de Córdoba además de los característicos lagares y cortijos blancos que salpican la zona.
Se trata de una zona de unas 5 hectáreas de extensión que cuenta con aparcamiento en el inicio del camino que conduce hasta al mirador (unos cinco minutos andando) y un sendero botánico circular con especies autóctonas como encinas, lentiscos, Jara, tomillo, zarzas, espino negro, guardalobos, matagallos, etc. Por este área habita también una fauna autóctona, pues la abundancia de matorral proporciona un refugio natural.