SERVICIOS SOCIALES. El delegado de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, Antonio López, ha visitado hoy el área de Servicios Sociales de Montilla y ha mantenido una reunión con el concejal de Servicios Sociales, Valeriano Rosales, para analizar el funcionamiento del proyecto piloto Lista 0, implantado desde septiembre en la localidad e impulsado por la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación. “Los buenos datos que tenemos en Montilla en cuanto a los programas de atención, revisión del grado o nivel de dependencia (PIA) es lo que ha determinado que sea nuestra localidad, junto con Lucena, las elegidas para desarrollar este proyecto piloto”, ha explicado el concejal Valeriano Rosales quien ha destacado también la colaboración del Ayuntamiento con otras administraciones con el fin de que las prestaciones a los usuarios lleguen de la forma más adecuada posible”.
El proyecto piloto, que recibe el nombre de Lista 0 tiene como fin, según el delegado de Igualdad y Políticas Sociales, reducir a cero las listas de espera en materia de dependencia y agilizar y reducir a la mitad el tiempo de espera del usuario en el proceso de recibir el recurso que demanda él y su familia. De momento, el proceso tiene dos fases, una primera que consta de una valoración por un profesional, y otra segunda en la que otro profesional diferente asigna el recurso adecuado, conocido como PIA. “Ambas fases se realizan en momentos diferentes y esto conlleva una ralentización del proceso y que la persona y la familia estén esperando el reconocimiento del grado de dependencia y el recurso durante aproximadamente un año”, ha explicado el delegado.
El proyecto piloto tiene como principal objetivo que estos tiempos se reduzcan a la mitad, entre 5 o 6 meses, y para conseguirlo, se realiza una única visita, la de un solo profesional que valora tanto el grado de dependencia como asigna el recurso, de manera que no solo se agilizan los tiempos, sino que se duplican los recursos humanos disponibles para otros usuarios.
Este proyecto piloto que tiene una duración de 7 meses, comenzó en septiembre y finalizará en marzo. Además, trae consigo un proceso de aprendizaje para los profesionales que se encargan de estos procesos, tanto para aquellos que realizan la fase 1, de valoración, como para los profesionales que realizan los PIAS (los que valoran el recurso que se asigna). Unos y otros asisten juntos a las visitas, conocen en profundidad el trabajo del otro compañero y pueden terminar desarrollándolo con futuros usuarios.