Opiniones

"El Periódico digital para el sur de Córdoba"

Se acerca la Semana Santa

A lo mejor a algún despistadillo que no me conoce bien le sorprende que yo dedique un artículo a hablar de este tema, es posible, pero para sacarlo de su estupor le diré que siempre he sido un seguidor de tan tradicional fiesta. Porque no teniendo convicciones religiosas también se puede disfrutar de la Semana Santa, eso sí, tienes que tener un cristal para mirarla que no sea el habitual, me refiero a que no todos miran esta semana mayor con el mismo prisma, y desde luego que el mío huye de lo religioso y se centra en lo cultural-artístico y antropológico. También es cierto que yo eso solo lo busco en mi pueblo, hasta en esto me diferencio del capillita normal que ya no se conforma con presenciar los pasos en Cabra, sino que viaja para buscar otras visiones semanasanteras, lo cual respeto completamente.

Y como muchos años las historias cofradieras comienzan cuando Don Carnal aún no ha tenido su esplendor entre el pueblo y Doña Cuaresma intenta robarle protagonismo. Esta vez podríamos decir que la primera controversia llegó con el cartel que anuncia la Semana Santa de Sevilla, la de Sevilla ni más ni menos, con lo plagiadores que son las cofradías egabrenses de esa semana. Pues bien, división de opiniones como en los toros, los tradicionalistas lo ven como casi una herejía, una blasfemia intolerable, mientras que los aperturistas lo ven como un cartel artístico y vanguardista que va con los tiempos que vivimos. Servida estuvo la polémica y a día de hoy todavía colean las protestas y denuncias de los que están en contra y piden su retirada. No me quiero imaginar si ese cartel se hubiera elegido en Cabra, aunque sé que eso es mucho imaginar, porque aquí no se encarga a ningún artista en particular y se hace por concurso de fotografía. Pero vamos, que un cartel con la imagen de un Jesucristo de apariencia andrógina sería una bomba en el pueblo.

Esto último me lleva a hablar de un tema que, aunque no es semanasantero y sí cofradiero, ha estado sujeto a todo tipo de comentarios en las redes y hasta se han hecho eco en la televisión andaluza. Me refiero a la expulsión como pregonero de la Cofradía de gloria del Rocío de Cabra del actual alcalde de Zuheros. Salida que no se produce motu proprio, sino que una vez que aceptó serlo, le comunican a posteriori que no puede por ser homosexual y haberse casado con otro hombre. El propio Juanma Poyato, egabrense de nacimiento, fue el que denunció lo ocurrido sintiéndose discriminado por su tendencia sexual, que era la misma que antes de casarse, sin esconderlo a nadie y siendo la cofradía del Rocío consciente de ello, ya que él es hermano de la misma. Desde luego que en los tiempos que corren qué menos que sentir que se vulnera la mismísima Constitución Española en su artículo 14, donde ante la ley no se puede discriminar, entre otras cosas, por sexo.

La cofradía sale diciendo que la iglesia no permite, en sus normas-dogmas que una persona homosexual que está casada con otra del mismo sexo pueda dar un pregón. Y me pregunto, ¿por homosexual o por casado, o por las dos cosas a la vez? La cuestión es que me consta que una serie de personas se entrevistaron con el cura consiliario de la cofradía del Rocío de gloria, y me dicen que se sentía mal por el asunto y que negó cualquier implicación suya en la censora decisión de retirar a Juanma Poyato de pregonero. Es más, añadió que no lo conocía y que de ese tema no tenía ni idea, que la cofradía se puso en contacto con él sólo para comunicarle que Fernando Priego sería el pregonero. Así pues, y dando por cierto todo lo relatado, la mala decisión es responsabilidad sólo de la cofradía, que ha sido la que, una vez apartado Juanma como pregonero, ha designado como plato de segunda mesa al alcalde de Cabra, Fernando Priego, quien parece que ha aceptado dar el controvertido pregón. Como éste no se ha manifestado sobre el tema, lo que no se entiende porque siempre está muy activo en las redes, las cosas ahora mismo están así. Muy penoso todo, y desde luego mi apoyo a Juanma Poyato a quien no conozco.

Pero volviendo a temas semanasanteros, ahora mismo parece que tampoco se sabe qué va a pasar con la apertura o no de los ya tradicionales cuartelillos por parte de las cofradías, ya que los hosteleros han expresado su opinión en contra de que estén abiertos tantos días y tantas horas, a lo que la Agrupación de Cofradías no ha respondido y por ahora no ha habido ninguna reunión conjunta de las partes implicadas. Sí parece que las partes se han reunido con el ayuntamiento, pero por separado, y no ha trascendido nada de ellas.

Este tema ya es antiguo, y me he preocupado de oír a gentes de ambas partes, por lo que tengo formada una opinión con la que, por descontado, no estarán de acuerdo muchos. Voy a intentar exponerla breve, pero claramente. Para empezar, es obvio que no es legal abrir locales que no cumplen las condiciones establecidas por las leyes en diversas materias. Los cuartelillos se abren porque el ayuntamiento les concede una exención durante el periodo de cuaresma, sin saberse hasta qué punto tiene potestad para ello. Esa apertura se hace solo para los días viernes, sábado y domingo, imponiéndoles un horario. Esto es lo que se ha venido acordando años atrás.

Los hosteleros dicen verse muy perjudicados cuando llegan estas fechas por la competencia desleal con los cuartelillos, ya que ellos pagan muchos impuestos y deben cumplir normas muy estrictas para abrir sus puertas, mientras que los otros están exentos de todo.

Los cofradieros por su parte alegan que los hosteleros se ven muy beneficiados durante la Semana Santa, y que ésta se da porque ellos la hacen posible.

Sobre la opinión de los hosteleros poco hay que opinar, es cierto lo que dicen sin peros. Ahora bien, la opinión de los cofradieros sí es discutible, porque no todos los bares están en el circuito por donde transcurren los pasos, sin embargo, cuartelillos hay en muchos lugares repartidos por el pueblo y perjudican a bares que no se benefician en nada de la Semana Santa. Por otro lado, hay que recordar que la Semana Santa, como ha ocurrido en Navidad, los bares están completos con reservas anticipadas por el simple hecho de que son días festivos y la gente se echa a la calle, y en Navidad no ha habido procesiones…

Añado, también los hosteleros se quejan de que hay cofradías que usan sus cuartelillos, o casas de hermandad, durante todo el año, pero no para celebrar cabildos o actos cofradieros, sino para usarlos como bar. Y yo les digo a esas cofradías: señores y señoras no abusen, porque esa es la cuestión el abuso que año tras año cabrea a los hosteleros.

Confórmense con que se mire para otro lado durante la cuaresma, sean conscientes de que ustedes no viven de eso, los hosteleros sí. Y si la banda de música que contraten no tiene tanto caché pues no pasa nada, y si los adornos florales no pueden ser tan costosos pues tampoco pasa nada, y si no se puede añadir más patrimonio a la cofradía pues ya se podrá con más tiempo. Siéntanse orgullosos de contribuir con vuestros ahorros a obras de caridad (esto sí es algo encomiable), cada uno hasta donde pueda, y déjense de competiciones por ser más que los demás.

Y ahora algunos me dirán, ¿pero por qué te metes en esos charcos? No sé, quizás porque uno ve esas cosas desde fuera y tiene el panorama más despejado; y porque me gusta la Semana Santa, y eso que cada día me lo ponen más difícil.