Córdoba
Personal y representantes sindicales se han concentrado ante la sede del sindicato con motivo del Día Internacional para la Erradicación de la Violencia de Género. En la concentración se ha dado lectura a un manifiesto con los compromisos de CCOO para luchar contra esta lacra social y se han guardado dos minutos de silencio por las víctimas.
CCOO ha sacado tarjeta roja a los maltratadotes en la concentración que ha celebrado hoy ante la sede del sindicato en Córdoba con motivo del Día Internacional para la Erradicación de la Violencia de Género tras la que se han guardado dos minutos de silencio por las víctimas.
Durante la concentración, a la que se ha sumado el personal de la organización y algunos representantes sindicales, se ha dado lectura a un manifiesto de repulsa por las más de 60 mujeres asesinadas en lo que va de año en el que, además, se ha reiterado el compromiso de CCOO con la eliminación y erradicación de las diversas formas de violencia ejercida contra las mujeres.
El sindicato hace una valoración positiva de la legislación contra la violencia de género, pero detecta carencias que es imprescindible subsanar mediante una mayor dotación a las instituciones y organismos públicos de más recursos económicos, materiales y humanos.
En el ámbito laboral, CCOO ha insistido en que los delegados y delegadas sindicales tienen la responsabilidad de velar por el cumplimiento de la legislación y por su desarrollo a través de la negociación colectiva y/o en los planes de igualdad de las empresas.
Por otra parte, la organización ha recordado que la violencia machista es un problema estructural, es una conducta que se aprende y se transmite y que sigue perpetuando los roles tradicionales de pareja en los que se fomenta la dependencia emocional en la mujer y la posesión en el hombre. La crisis económica puede empeorar la situación, pues las desigualdades y discriminaciones se acentúan.
Ante la violencia de género, CCOO reitera su compromiso de promover la colaboración con el conjunto de las administraciones públicas y distintos actores sociales implicados, reforzar la difusión de medidas y derechos en materia de igualdad, contribuir a hacer efectiva la Ley en el ámbito laboral e impulsar el desarrollo de políticas de igualdad que favorezcan los necesarios cambios educativos en valores y actitudes sociales.
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