El sector citrícola se ha reunido en un acto solidario en la sede de ASAJA Córdoba para denunciar la situación crítica que sufre el sector citrícola, con precios por debajo de los costes de producción (0,15 euros/Kg.), siendo el precio que paga el consumidor entre 1,60 y 2 euros/Kg. por una naranja de alta calidad En dicho acto, se han repartido 1.000 Kg. a CÁRITAS y se ha reivindicando un precio justo y el consumo de la naranja de calidad local. Cáritas repartirá las naranjas a las personas que atiende diariamente en el Centro de Transeúntes, en el de Mayores en Exclusión Social del Sector Sur, en el Economato Social y en pisos de acogida y familias atendidas por los servicios de Cáritas parroquiales

No es la primera vez que ASAJA Córdoba denuncia la crisis de precios y falta de rentabilidad que atraviesan las explotaciones citrícolas, con precios por debajo de los costes de producción 0,15 euros/Kg. en contraposición a los precios astronómicos que pagan los consumidores en los que apenas el 10% supone lo que se ha pagado al agricultor. Estos precios han llegado a superar en ocasiones los 2 euros/Kg. en los lineales de los principales supermercados y centros de la gran distribución.

Por este motivo, el Presidente de ASAJA Córdoba Ignacio Fernández de Mesa, un grupo de citricultores y el Presidente de la Sectorial de Cítricos de ASAJA Córdoba Nicolás González, han donado 1.000 Kg. de naranjas al Coordinador de Centros de CÁRITAS José Repiso, quien valoró que “quienes pasan dificultad ayuden a los que tienen menos” y señaló que los destinos de estas naranjas serán el Centro de Transeúntes “Madre del Redentor”, de 40 plazas; el Centro de Mayores en Exclusión Social “San Pablo”, también con 40 plazas; el Economato Social, desde el que se atiende a más de 500 personas; pisos de acogida para exreclusos, con 12 plazas; y familias atendidas por los servicios de Cáritas parroquiales, cuyo número es cada día mayor.

Fernández de Mesa señaló que la situación que atraviesa el sector citrícola –cerca de 12.000 hectáreas en la Vega del Guadalquivir cordobesa- es insostenible, siendo la segunda campaña consecutiva con precios por debajo de los costes. Es por ello que los citricultores han decidido entregar parte de su producción a los más necesitados antes de seguir perdiendo dinero, viendo como la cadena de distribución abusa de los consumidores.

Por su parte, Nicolás González indicó que han sido los integrantes de la Mesa de cítricos, cooperativas comercializadoras, empresas de venta por Internet y agricultores a título particular quienes han participado en este acto, destacando que se trata del cultivo más social, ya que ocupa a 3.500 personas a lo largo de 6 meses, pues desde octubre se empiezan a recoger las primeras naranjas y la campaña de recolección se mantiene hasta abril.

El sector reivindica una modificación de la normativa de la competencia que preste, sin mermar la defensa del consumidor, más atención al sector primario, así como una Ley de la Cadena alimentaria que aborde el problema con la gran distribución. ASAJA Córdoba participa activamente en la elaboración del anteproyecto de esta ley, exigiendo se tengan en cuenta prácticas comerciales abusivas tales como la venta a pérdidas y el uso de los productos agroalimentarios como reclamo.

Bajo el lema de “Nadie nos ayudará sino empezamos a hacerlo nosotros mismos…”, ASAJA Córdoba hace un llamamiento al sector para que se unan y reivindiquen los derechos del sector productor con actos de este tipo, antes de que los citricultores se vean obligados a abandonar sus explotaciones con todos las consecuencias que esto tendría medioambientalmente y de pérdida de puestos de empleo, por ejemplo.