Desde que el gobierno de la Generalidad de Cataluña celebrara un referéndum ilegal en dicha Comunidad Autónoma el famoso 1-O del año 2017, la independencia ha sido el tema central en los discursos de la política española, y especialmente tras las elecciones del pasado 23J cuando los resultados electorales dejaron la formación del gobierno de España en manos del partido que por aquel entonces ostentaba la presidencia en Cataluña.
Si bien su majestad el Rey Felipe VI en base a la “costumbre” derivada del artículo 99 de la Carta Magna designó al líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo como candidato a la investidura tras haberse proclamado como ganador de las elecciones generales del pasado mes de julio, lo cierto es que tras su fracaso en dicho proceso ha empezado a sonar con más fuerza la posibilidad de que el actual presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ceda al chantaje de los partidos nacionalistas y acuerde la celebración de un referéndum de autodeterminación en Cataluña con el fin de lograr la investidura. Tanto es así que incluso los populares egabrenses (probablemente influenciados por los intereses partidistas de su líder y senador popular) han hecho estas afirmaciones en el Pleno ordinario del mes de septiembre del Ayuntamiento de Cabra.
Pero, ¿realmente desde el Partido Popular hablan con conocimiento de causa? Y es que teniendo en cuenta que la mayoría de políticos de nuestro país y, por ende, del PP son licenciados en Derecho, resulta gratamente sorprendente que afirmen tan claramente que el PSOE cederá a este chantaje, pues siendo conocedores de la Constitución Española, la realidad es que resulta materialmente imposible. Esto último se explica por varios motivos.
En primer lugar, el artículo 92 de la norma suprema establece que el referéndum es de carácter consultivo, lo cual deja entrever que lejos de las posibles consecuencias políticas o electorales que pudiera tener esta consulta no tendría efecto material alguno.
Así, para que el carácter del referéndum fuera vinculante deberíamos acudir al complejo procedimiento del artículo 168 de la CE, debido a la necesidad de reformar el art. 2 de la misma referente a la indisoluble unidad de la Nación española. En ese sentido, en esta Legislatura sería imposible ya que en ninguna de las Cámaras existe la mayoría de 2/3 para aprobar dicha reforma que a posteriori debería ser ratificada nuevamente en referéndum a nivel nacional tras una previa aprobación por las Cortes surgidas de unas elecciones.
Entonces, ¿alguien cree que esta hipótesis es posible? Mientras que un sector de la clase política afirma que sí haciendo gala de la frase de Alfred Croiset “el enemigo más temible de la democracia es la demagogia”, lo cierto es que basándonos en la Ley la respuesta debe ser un rotundo NO como ya ha advertido el líder del PSC, Salvador Illa.
Por tanto, a partir de este momento veremos si finalmente el actual presidente del Gobierno, Pedro Sánchez consigue revalidar su mandato una vez reciba el encargo del Rey para ser candidato a una investidura con el apoyo de Junts. En cualquier caso, sea como fuere y pese al humo que venda el Partido de la Gürtel lo cierto es que la celebración de un referéndum de autodeterminación en Cataluña será imposible, y, por tanto, la independencia.
