El gobierno de Aragón, una coalición de la derecha extrema del PP y la extrema derecha de Vox, derogó en su Boletín oficial del 29 de febrero de 2004 la Ley de Memoria Democrática. Para hacerlo utilizó la falsa equidistancia porque cuando habla de víctimas olvida lo más importante: mientras que las víctimas de la represión republicana fueron recordadas con calles, placas, cruces ( y sus familias recibieron los privilegios del Régimen golpista y asesino) desde 1939, las víctimas de la represión franquista siguen en su gran mayoría hoy- casi 90 años después- en cunetas y fosas comunes.
Hay en esa derogación por una parte un descarado intento de equiparar a víctimas y verdugos y por otra borrar la memoria democrática republicana. Esa y no otra es la verdadera intención de la sarta de excusas con pretensiones de ley que han vomitado sobre el Boletín Oficial de Aragón.
Basta con hacer un recorrido por los elementos que suprimen: “El Censo de memoria democrática de Aragón, las Rutas de memoria democrática de Aragón, el Inventario de lugares y rutas democráticas de Aragón, y el Centro de Investigación de la memoria democrática de Aragón” (sic), eliminando además “los elementos de identificación, interpretación, señalización y difusión previstos en la citada Ley” (sic).
Es decir, su única pretensión es anular nuestro recuerdo, nuestra memoria, nuestro relato, para imponer el suyo.
Un ejemplo como botón de muestra: si vas a Teruel, capital de una de las tres provincias aragonesas a las que afecta la Ley de derogación, te encontrarás en la catedral la cripta donde reposan los restos del obispo Polanco (lógico que la Iglesia honre a los suyos) y de propina el Hospital con su nombre y un monumento a su memoria, obra de Juan de Ávalos, erigido en la plaza de las Monjas.
Anselmo Polanco Fontecha obispo de Teruel desde 1935, apoyó sin reparos el golpe de estado de Franco, fue hecho prisionero durante la toma de la ciudad por las tropas republicanas y terminó su vida fusilado en Gerona en 1939.
Al Gobierno del PP y Vox que tanto le molesta la Memoria democrática no le molesta en absoluto la exaltación de personajes con esta biografía. Todo lo contrario.
Y si la excusa para considerar normal tanto enaltecimiento es la de que el obispo fue una “ víctima” de la guerra fratricida, puede darse un paseo hasta los pozos de Caudé ( a solo 6 km. andando desde la escultura del obispo de la plaza de las Monjas ) y elegir entre los más de 1000 civiles turolenses fusilados por “desafectos” al nuevo Régimen entre agosto del 36 y diciembre del 37, algún nombre para hacerle un monumento similar al del obispo. Tendría perfecta cabida en la plaza, no se estorbarían y demostrarían con hechos su cacareada equidistancia.
Pero no te preocupes que eso nunca pasará porque - parodiando a Orwell- “algunas víctimas son más víctimas que otras”.
En el relato “igualitario” que pretenden imponer tratan la represión como un “empate”, sin vencedores ni vencidos. Aunque ellos que son futboleros saben en su fuero interno que si un partido Real Madrid -Zaragoza queda 20 a 4, no se ha producido ningún empate sino una goleada de escándalo. La que quieren borrar.
El problema es que esta iniciativa se enmarca en un sinfín de acciones que la Derecha “patriotera” (que no “patriota” pues esta palabra tiene una carga de dignidad que no está al alcance de las pulseritas) coordina en toda España con el mismo objetivo: lograr tal hegemonía cultural - nuestro Gramsci nos recordaba su importancia una y otra vez- que apague las voces disonantes sobre el relato amañado.
Y ahí se encuadran -solo basta traer a esta reflexión algunos acontecimientos de la última semana- las estupideces de los curas de la " fachoesfera " rezando por la muerte del papa Francisco, la exaltación fascista de la Falange en el teatro Goya de Madrid ( sin que un juez de oficio intervenga porque se ha vulnerado la vigente ley. Es curioso el olfato que tienen algunos juristas para detectar separatistas- terroristas a miles de kilómetros de distancia y la incapacidad de oler a un nazi, aunque lo tengan delante de sus narices. Será que las colonias se mezclan y se despistan) o, lo que es más demencial, el nombramiento realizado por la Junta de Andalucía para el cargo de director del Patronato García Lorca.
Me explico. A Juan Manuel Moreno, presidente andaluz con fama de no tener ningún mal gesto y ninguna buena acción, se le ha ocurrido poner al frente de la institución que lleva en su nombre el del poeta asesinado por el fascismo granadino a Antonio Manuel Membrilla, personajillo que hasta ayer se burlaba de la memoria histórica llamándola en sus redes sociales “memez histórica”.
En Andalucía sabemos que quien pregona memeces y gilipolleces como las que ha aventado este individuo suele inspirarse y ensayar mirándose la cara en un espejo, pero ¿imagináis la de rosarios y concentraciones que se harían a las puertas de las sedes de partidos de la Izquierda si un gobierno pusiera como responsable de todo lo relacionado institucionalmente con la Semana Santa al ateo más confeso?
Desde que se han quitado la careta los “antitodo” (luego con el tiempo se apropian de los avances sociales y pasan del "no a la Constitución" a ser los más constitucionalistas, de " la familia desaparece con la ley del divorcio” a coleccionar matrimonios, de “luchar contra los chiringuitos públicos” a copar cualquier puesto...como dice la chirigota callejera gaditana “Clínica del Doctor Potato”: “… y cada vez que hay un cambio / los fachas sacan las uñas/ verás que al final defienden/ la independencia de Cataluña”) van lanzados y sin frenos a construir una España intolerante, cateta, negra y ultracatólica donde solo se oiga la voz de su amo.
Por eso no podemos tomarnos a chufla la situación y considerarla solo charlotadas de un puñado de descerebrados (que también).
Su apuesta por destruir todos los avances sociales está en la mesa de la ruleta y la bola va girando. Cuanto más desarmados estemos y más silentes, más fuertes sonarán los tambores de la guerra en la que los poderes fácticos y los lacayos OTAN nos quieren embarcar (El País " Europa se pone en pie de guerra", suavizando la primera información de "Europa se prepara ya para un escenario de guerra", en la misma línea que el globo sonda lanzado por el presidente francés Macrón). Tienen en nómina a quienes les hacen el trabajo sucio en nombre de España.
Pongámonos las pilas que la oleada ultra amenaza con llevarnos por delante y ya se sabe que de la risa al llanto hay muy poco trecho.
No hagamos más el memo. Ese papel ya lo tiene cogido Membrilla.
Pd- Media hora después de publicar el artículo nos llega la noticia de la dimisión del interfecto. Es lo que suele ocurrir cuando aflora la contestación ciudadana y no el silencio cómplice.
