Siempre se ha dicho que cuando nos portamos mal los Reyes Magos nos traen carbón. Pues yo pido que este año Sus Majestades traigan sacos y sacos de carbón para todos y cada uno de nuestros políticos; me da igual del partido que sean, todos son iguales y sólo buscan sus intereses particulares, importándoles un pimiento (por no decir algo más feo) los intereses y las necesidades de los ciudadanos.
Desde que empezó la pandemia, hace ya casi dos años, hay cosas que se han hecho bien -por supuesto-, pero también hay muchas otras que se han hecho mal, muy mal. Todos las conocemos, pero por mencionar algunas: se ha recortado en educación y en sanidad (profesionales que han estado ahí, dando el callo desde el principio de la pandemia, y que ahora ya no se acuerdan de ellos), no se han prestado las suficientes ayudas a los colectivos más afectados, no se presta la suficiente vigilancia para que las normas se cumplan, se ha metido a 30 niños/as en una clase con las ventanas y las puertas abiertas, donde difícilmente se puede mantener la distancia de seguridad y donde lo único que pueden pillar es un buen resfriado, se ha tardado mucho en vacunar a personas de riesgo y a personas que estaban trabajando sin ser vacunadas y expuestas al virus… Podría seguir así todo el día, pero creo que todos y todas somos conscientes de las barbaridades que tanto el Gobierno Central como el Autonómico han realizado desde el inicio de la pandemia y que, por supuesto, hoy día siguen realizando y seguirán en un futuro -si Dios quiere que dirán ellos-. Y esta mala praxis es la que ha dado pie a tanto negacionista que ha confundido las churras con las merinas, siendo ahora el colectivo más perjudicado y que más perjudica.
Llevo ya bastante tiempo pensando en todo esto, pero lo que me ha llevado a escribir este artículo son las últimas ¿medidas? (sí, con interrogación porque creo que a eso no se le puede llamar ni medidas) que se van a tomar de cara a estas fiestas navideñas. Para empezar, Pedro Sánchez tendría que haber convocado la reunión de presidentes autonómicos muchísimo antes de lo que lo ha hecho porque estamos a dos días de Nochebuena. ¿En qué estaba pensando?, ¿qué asuntos tenía entre manos muchísimo más importantes que la pandemia que estamos sufriendo? Me gustaría saberlo, la verdad.
Pero bueno, la ha convocado y la reunión ya ha sido. ¿Qué medidas se van a tomar? Pedir el pasaporte COVID en hostelería, ocio nocturno y eventos que se realicen y mascarilla también en exteriores. El pasaporte COVID, como todos sabemos, ya estaba impuesto antes de la celebración de la reunión en algunas comunidades, por lo que la única medida que el Gobierno Central ha adoptado es el uso de mascarilla en exteriores. No sé qué os parecerá a vosotros, pero a mí me parece que esta medida es totalmente insuficiente y que se deberían de llevar a cabo otras. Entiendo que es duro poner restricciones, y que esto dañaría la economía, pero creo que la salud debe prevalecer ante todo y que no se está teniendo en cuenta.
Yo soy joven, y me encantaría poder acudir a una fiesta de fin de año, poder juntarme con mis amigos y hacer comidas como en otros años… pero creo que debemos ser cautos y responsables, y ser conscientes de la situación crítica en la que nos encontramos, por mucho que Juanma Moreno y Pedro Sánchez digan que no estamos tan mal y que no son necesarias las restricciones. Recuerdo cuando Moreno le decía a Sánchez que necesitaban más autonomía para gestionar la pandemia en Andalucía; pues ahí la tiene Sr. Moreno, toda suya. ¿Qué ha hecho usted? A la vista está.
Tengo una teoría por la que, bajo mi punto de vista, repito, no quiere decir que sea cierto ni mucho menos, ni el Gobierno Central ni el Autonómico se atreven a poner restricciones. Simplemente no las ponen porque saben que perderían muchísimos votos de jóvenes que no estarían de acuerdo con estas medidas. La población juvenil es muy alta, y estoy seguro de que muchos no verían de forma positiva estas medidas, por lo que influiría en su voto en las próximas elecciones, y eso a nuestros queridos políticos no les interesa.
Visto lo visto, sólo me queda hacer un llamamiento a la conciencia colectiva y a la responsabilidad ciudadana (que no sé yo si habrá mucha porque tampoco es que se esté notando en lo que llevamos de pandemia), porque está claro que los políticos no van a hacer más de lo que han hecho hasta ahora: NADA.
Por favor, Sus Majestades, acuérdense del carbón para nuestros queridos gobernantes, de mi parte y de todos los que sé que piensan como yo.
Felices Fiestas para todos/as, y que el año 2022 sea mucho mejor que este que está a punto de acabar. Recuerden: responsabilidad.